Si eres de las personas que busca ofertas, revisa periódicamente Amazon y quiere salvar el presupuesto de bolsillo, podrás notas la aparición de los mouses para gaming muy baratos. Un listado sin final de marcas de ratones y periféricos desconocidas, todos similares desde apariencia hasta el rendimiento que demostrar.
Este fenómeno ocurre porque mayormente los accesorios y periféricos son infectados por el rebranding. No es algo nuevo ni malo, es una tendencia que optan firmas o pequeñas empresas de China, eligen un modelo y lo personalizan a su estilo.
Antes de explicar la fiabilidad de los periféricos de otras marcas o firmas desconocidas, hay que definir el origen del rebranding. El Rebranding, significa en inglés, un cambio de marca, aunque no sea el uso exacto, mantiene la idea principal. Por ejemplo, creas un diseño de audífonos inalámbricos de tres colores distintos, batería de buena duración y goma intercambiable. Entonces, el diseño principal lo presentan a los fabricantes de buena competitividad, y utilizarán tu diseño o para ellos, el molde para personalizarlo, agregar y eliminar algunas partes.
Esta es una de las maneras, en como los productos suelen terminar fabricados por series y enormes cantidades, por muchos fabricantes desconocidos, intentando replicar los productos para entrar al mercado competitivo. Por ello, vemos de ejemplo, una variedad de periféricos, y todos de un mismo origen.
Una práctica muy utilizada por lo que podemos llegar a pensar, que los fabricantes más conocidos, pueden recurrir a estas técnicas. De hecho, ocurrió en el pasado, la empresa KROM creó tres mouse diferentes pero que utilizan el mismo software de configuración, el BG Xonar X6, el KROM Konor y por último, los Hiditec IKOS. Si investigas, puedes verificar la similitud y la única diferencia es la personalización externa, es decir, rebranding. Hoy por hoy, la empresa aprendió de sus errores y fabrica periféricos originales como totalmente personalizados.
Anteriormente se mencionaba que la fabricación de los periféricos en serie y producción de grandes cantidades, tienen como finalidad ahorrar los costos. Esto influye en la calidad del producto, a utilizar materiales muy económicos. Así que la respuesta es no, no valen la pena.
Podemos llegar a comprar pero es una lotería conseguir un equipo que sea bueno. Por ejemplo, eliges un mouse para gaming por la llamativa estética y algunas configuraciones avanzadas, ahorrando dinero, no esperes un rendimiento mayor y prolongado. Puede que un mouse para gaming te rinda como uno superior y de marca conocido a 100 euros. Pero al final, pueden ocurrir dos escenarios diferentes: Terminar durando por años o tres meses después deja de funcionar.
En última instancia, cuando se habla de hardware y mucho más, en accesorios: Si es muy económico, no vale la pena.
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